jueves, 16 de junio de 2011
Esta vez realmente me lo creí
No aprendo. No se que estoy comiendo ultimamente, que mis sueños tienen una gran calidad de detalles y parecen completamente reales. Llevo cuatro días seguidos comiendo de Burger King, a saber que puñetas le echan a eso...
El caso es que yo no aprendo, porque esta noche volvías a estar ahí y la excusa volvía a ser la misma de siempre: Solo estabas inconsciente. Y como siempre, todos nos la creíamos.
Pero es que esta vez era MUY real: Yo cogía mi portatil y tú el ordenador grande e intentabas arreglarlo de no se qué virus que lo había infectado, cuando te salían algunas cosas bien te ponías muy contento, cuando no, te enfadabas y le gritabas absurdeces al monitor, al igual que hacías antes. Entonces yo te abracé y lloré como nunca había llorado en mi vida, lloré como no fui capaz de llorar aquella semana de Shock, por todo lo que te había echado de menos, porque hace mucho tiempo que necesito ese abrazo y se que nadie me lo va a dar.
Normalmente en este tipo de sueños me suelo despertar en esa escena, pero en este no, este continuó, hicimos vida cotidiana los cinco durante bastante tiempo, puede que una semana, no recuerdo cosas de ese tiempo, pero ya se sabe como son los sueños. No recuerdo ni que estaba haciendo cuando desperté de este.
La cosa es que por muy doloroso que sea despertar, me gusta soñar contigo, porque vuelvo a verte. Se que no eres tú en realidad, se que solo es mi mente pero me da igual, es el único modo de reencontrarme contigo.
A veces pienso ojalá viviese en ese sueño siempre, donde todo es perfecto excepto una cosa, que no es real.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario